En La siempreviva, la emblemática obra de teatro de Miguel Torres que recrea la desaparición de una de las trabajadoras del Palacio de Justicia durante la toma y la retoma de 1985, el autor hace sentir al espectador los devastadores efectos que tiene para los familiares el hecho de no poder sepultar a sus muertos. Por su lado Sara Uribe, en Antígona González, su más reciente poemario, extrapola el mito clásico de Antígona y la obra de Sófocles al México contemporáneo, y logra un canto sobre la violencia causada por la guerra contra las drogas en Tamaulipas, el estado con el mayor número de personas desaparecidas en ese país. En este conversatorio, Miguel Torres y Sara Uribe hablan con Paola Guevara acerca del proceso creativo de sus libros, desde el génesis hasta la publicación y el encuentro con sus lectores.